¿Son los perros pequeños realmente más agresivos?

¿Son los perros pequeños más agresivos? El otro días estábamos unos amigos sentados en una terraza saboreando lo que sería uno de los últimos días de verano. Pasaba mucha gente por delante de la terraza, y mientras charlábamos disfrutábamos del espectáculo de ver a distintos tipos de personas transitar delante nuestro. En un momento se acercaba por nuestra derecha una señora con un chihuahua que no debía levantar más de 15 cm del suelo, pero que caminaba con un agarre y brío que más bien pensabas que era un dogo. Al mismo tiempo por nuestra izquierda pasaba un chico con un labrador precioso, de esos rubios dorados tan bonitos. Desde el momento en que el chihuahua se percató de la presencia del labrador, se transformó en un monstruo al que solo le faltaba echar espuma por la boca, tal era la ira que el labrador le provocaba. Se deshacía en ladridos, tirones de correa y gruñidos mientras que el labrador no era que le ignorase, es que yo creo que realmente no lo veía. La señora al final tuvo que coger al pequeño energúmeno en brazos para ser capaz de avanzar y alejarse acera abajo. En ese momento una de las personas sentadas en la mesa vecina comentó: «estos perros pequeñines siempre tan agresivos». Pero ¿son realmente los perros de tamaño miniatura más agresivos, y más ansiosos?

por que perros pequeños agresivosLa agresividad en los perros

Para analizar este estereotipo, se llevó a cabo un estudio en la Facultad de Veterinaria de Viena en el año 2010, conducido por la Dra Christine Arhant. El estudio se aplicó a 1276 propietarios de perros, a los que se les preguntaron hasta 237 cuestiones.

Por razones estadísticas los perros se dividieron en 2 grupos: aquellos con peso superior a los 20k y los de peso inferior. Se preguntó a los propietarios sobre comportamientos relacionados con la obediencia, como si los perros obedecían a la primera; si el perro estaba siempre más o menos atento a su dueño; si aprendía fácilmente nuevas órdenes, si tiraba de la correa…; en segundo lugar se estudió la excitabilidad o nerviosismo de los animales, y en este caso se preguntó si los perros gruñían o ladraban a otros perros o personas, si llegaban a pelearse o atacar o si se volvían agresivos cuando comían; y Perro pequeño agresivoel tercer lugar se estudió la ansiedad, mirando datos sobre su respuesta a ruidos fuertes como los fuegos artificiales o sirenas o si mostraban miedo a ciertas personas u objetos.

Este estudio buscaba demostrar si estos comportamientos tan típicos de los perros pequeños tenían una base genética o bien eran medioambientales o provocados por sus circustancias individuales. Lo que el estudio demostró, para sorpresa de muchos, es que esos comportamientos tan característicos de los perros de menor tamaño eran originados en la mayoría de los casos por una mala educación por parte de sus propietarios.

Perros pequeños están más consentidos

Los propietarios de perros pequeños no interactúan con su mascota de la misma manera que el propietario de un perro de gran tamaño, y esto tiene su efecto más palpable en el comportamiento de ambos animales. Así, el dueño de un pastor alemán, por ejemplo, tendrá siempre presente durante la educación de su cachorro que su perro de adulto puede provocar realmente daño si ataca a una persona o a otro perro, y lo educará en consonancia a este hecho. Intentará que sea lo más obediente posible, que sea calmado, que no se muestre agresivo hacia otros perros. El propietario de un perro grande busca en su mascota un compañero, y lo educa en consonancia. En el otro extremo tenemos el dueño de perro pequeño. Esta persona tiende a sobreproteger y malcriar a su mascota, porque las consecuencias son casi siempre mínimas, y lo educará como si fuera un niño caprichoso. Al fin y al cabo, no pasa nada porque un perro de 3k sea agresivo, sino que por el contrario resulta hasta gracioso.

Lo vemos continuamente a nuestro alrededor. Perros pequeños que se han convertido en los dueños de los hogares y tienen a sus propietarios a su servicio. Incluso en el programa de televisión «Malas Pulgas» vimos muchos de los capítulos dedicados a este problema de comportamiento. No se me olvidará el capítulo en el que una señora se quejaba de que el perro, al que adoraba, la mordía cuando intentaba bajarlo del sofá. Lo que cuando el animal es Perros pequeños violentoscachorro puede resultar tierno, como ver un chihuahua de 3 meses gruñendo cuando te acercas mientras come, será un problema de adulto. Cuando los cachorros son criados en una manada, aprenden enseguida que existe una jerarquía, y poco a poco irá encontrando su lugar en la escala social, peleando para ir ganando posiciones, y defendiendo estas posiciones ganadas; o bien, si ese es su carácter, aceptando una posición sumisa al final de la cadena de mando. En nuestro hogar pasará realmente lo mismo.

Es nuestra responsabilidad educar a nuestras mascotas para conseguir que sean animales equilibrados y felices.

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